“Pero tú, Belén Efrata, pequeña para estar entre
las familias de Judá, de ti me saldrá el que será Señor en Israel; y sus
salidas son desde el principio, desde los días de la eternidad.” Miqueas 5:2
Ella se veía totalmente inalcanzable, como en
esas historias en las que la chica es la princesa y él… bueno él... Es algo así
como el Jorobado de Notre Dame.
Ella sabía que él no era el príncipe, pero no
siempre el chico guapo es el que se lleva a la más bella del lugar.
En ciertas
historias el amor sobre pasa nuestras expectativas, y se asegura de hacer que
la persona más maravillosa ponga su corazón en manos del menos pensado.
Nadie hubiese imaginado que ella se fijaría en mí,
ni siquiera yo mismo.
Pero el amor real hace esas cosas, no nos da lo
que merecemos, nos da mucho más.
El texto de hoy nos enseña que Jesús escogió la tribu más
pequeña, el pueblo más rustico, el lugar más humilde, y la razón menos justa
para nacer.
No lo merecíamos, pero nos escogió. Y siendo un rey decidió
parecerse a nosotros y amarnos a pesar de lo que somos.
Navidad trata de este tipo de amor, de sentirnos amados de
esta forma, de saber que el rey de todo, tiene sus ojos puestos en ti, a pesar de
cómo eres.
Te invito que en esta navidad te sientas especial, porque el
ser más hermoso del universo te escogió.
Te invito también a que celebres con la misma humildad que
tuvo Jesús al nacer, no dándole importancia al Lugar, ni a las cosas, ni los estereotipos,
sino dándole importancia al amor, a la paz, y sobre todo a las personas.
FELIZ CASI NAVIDAD.